Hasta el Sol

Hasta el Sol quiso saludarte, querido compañero.

Por: Carlos Origüela (Frente Izquierda de Liberación)

¿Cómo plasmar en palabras una gesta tan fecunda sin caer en frivolidades o imperdonables omisiones?

¿Cómo describir al hombre que, de chiquilín de barrio humilde se transformó en un científico de excelencia, en un político de pura cepa, en un líder admirado por propios y ajenos, en un estadista de escala planetaria?

Hubo una señal que hizo un poco de justicia, la que titula este homenaje: la imagen de ese Sol radiante que quiso iluminar el paso de este enorme ser humano rumbo a la eternidad, acompañado por su pueblo. Ese Sol lideró a esa multitud, que retendrá a su héroe en su corazón y lo hará presente en sus luchas.

La huella de Tabaré

El Presidente que construyó mucha de la institucionalidad que enorgullece a nuestro país, el Presidente que batalló con valor contra el Goliat del mercantilismo de la muerte y lo aplastó, el Presidente que puso a la desigualdad contra las cuerdas, con su Plan Ceibal, con su Hospital de ojos José Martí, con su Sistema de Cuidados.

Una vida de intensidad y de humanidad ejemplares. La injusticia fue su adversario, y la combatió desde su temprana juventud. Acaso es siempre generación vanguardia de la lucha contra todo tipo de injusticia.

La forja de la unidad del Frente Amplio como tarea permanente, su conciencia de clase obrera y el respeto a su historia, su ejemplo de solidaridad y entrega que con valentía asumió hasta hoy, sus enseñanzas y su visión, su seriedad internacionalista y de futuro.

Con la memoria presente:

Tomaste el timón en medio de aguas embravecidas, y aquellas promesas se hicieron realidades, aquellos deseos se hicieron compromisos, aquellos sueños se hicieron historias vivas.

Porque nos conmueven todas las injusticias, porque resta mucho por hacer y tu legado y tus enseñanzas son nuestro camino, porque nos demostraste con tu vida que un frenteamplista NO SE RINDE.

Recordando afectuosamente lo que expresaras en ocasión de la partida del Gral. Seregni, hoy decimos:

“Padre Artigas, ahí va tu Presidente”